Conoce tus Probabilidades y Outs
Ya sea que seas un jugador de partidas de anillo buscando mejorar tus ganancias, o estés perfeccionando una estrategia de sit ‘n’ go para aumentar tu retorno de inversión en torneos, entender las odds del bote es un arma importante en tu arsenal.
Donde esto suele tener un papel importante es cuando crees que estás perdiendo contra una mano más fuerte, pero ganarás el bote si se reparte una carta específica. Digamos que tu oponente apuesta, y tienes esta pregunta común que considerar:
“¿Debería igualar con la esperanza de recibir la carta que me ganará el bote?”
En realidad, hay una manera bastante simple de descubrir la respuesta a esta pregunta, y si bien implica una pequeña cantidad de matemáticas, ¡ciertamente no necesitas ser un genio para hacerlo!
En primer lugar, necesitas contar el número de cartas que crees que te ganarán el bote. Digamos que en el turn tienes cuatro tréboles y necesitas uno más para hacer un color, de lo contrario, estás seguro de que perderás el bote. Hay 13 tréboles en la baraja, de los cuales tienes 4, dejando 9 tréboles restantes para ganar. Estas 9 cartas se conocen como tus ‘outs’.
A continuación, calcula el número de cartas no vistas restantes en la baraja. En un juego de Hold'em, en el turn, puedes ver 6 cartas (tus dos cartas en mano más las cuatro cartas comunitarias), lo que deja 46 cartas que no son vistas.
De estas 46 cartas, 9 son tus outs y ganarán la mano, quedando 37 cartas que no ganarán. La proporción de cartas ‘malas’ a cartas ‘buenas’ en este escenario es de 37 a 9, o muy cercano a 4 a 1. Esto significa que la probabilidad de recibir tu carta ganadora es alrededor del 20%.
Entonces, ¿deberías igualar la apuesta? Aquí es donde entran las ‘odds del bote’ - la relación de fichas en el bote con las fichas que necesitas para igualar. Si esta relación es mayor que la proporción de cartas ‘malas’ a ‘buenas’, entonces deberías igualar. Si es menor, deberías retirarte.
Pongamos un ejemplo para ilustrar este punto más claramente.
Con 4 tréboles en tu mano y 9 outs que te ganarán el bote, imagina que tu oponente apuesta 100 fichas en un bote que ya contiene 100 fichas. La relación del bote (200 fichas) con la cantidad que debes aportar (100 fichas) es solo 2 a 1, menor que la oportunidad de 4 a 1 que tienes de conseguir tu out y ganar el bote. Eso es una clara retirada.
Ahora, imagina el mismo escenario, pero esta vez el bote contiene 4900 fichas y tu oponente apuesta 100 fichas. La relación del bote (5000) con la cantidad que debes aportar (100 fichas) es ahora de 50 a 1, mucho mayor que la oportunidad de 4 a 1 que tienes de ganar. ¡Eso es una clara igualada!
Al hacer esto, te aseguras de que, si bien aún estás tomando un riesgo, te están recompensando de manera desproporcionada cuando tiene éxito.